Turmenta du facha

Adrián Vergairacunda se carectirizó desde su infancia por pelearla desde abajo. Trabajó de seca pitos y de pintor de culos de hombres. Pero otra profesión yacía en su corazón desvelado. La de canta autor. Así comenzó a tocar la viola. Pero un defecto haría de su música un hecho único en el ambiente artístico. Solo podía tocar el acorde Fa. Hoy en día es un soltero "sin apuros" como le gusta declararse. Ferviente admirador de Mauro Viale, tiene la colección completa de las novelas de Facundo Arana. No le cabe la gancho.