
Con el estadio Maracaná completo, casi 100 mil personas fueron testigos de este extraño Fair Play un tanto cariñoso.
Philippe Coutinho, un hábil jugador del Vasco, se iba solo al gol, pero Williams le cometió una fuerte falta y fue penal. Hasta ahí, nada que jamás se haya visto.
Lo curioso vino después. Con ambos jugadores tirados en el piso, Williams se acercó gateando hasta donde estaba Coutinho y le pidió disculpas… ¡Pero con un cariñoso beso!
No hay comentarios:
Publicar un comentario