Las Crónicas de McLOVIN: Ví un fantasma.

El relato que tengo para contar hoy no es tan agradable como los anteriores. Debo confesar que la historia del día de hoy me trae recuerdos que preferiría enterrar por siempre en lo más hondo de mi subconsciente.
Pero es menester informarles. En una de las cuantiosas previas realizadas en el rancho de Villa Gesell, me encontraba fumando un caño en el altillo tranquilamente, mientras escuchaba Bob Marley con atención y picardía.
Tras subir uno de los ebrios de costumbre, Felipe B., decidí descender ya que comenzaba a molestarme con su monólogo de como lo habían echado de un boliche (próxima crónica).
Al estar en la sala de estar, ví algunos cuerpos tirados en el piso, y otros en la cama. Eran humanos que sufrían el efecto de la sobredosis de alcohol. Mi horror se acrecentó y pensé que sería conveniente dar una vuelta por la calle para despabilarme. Cuando abrí la puerta, observé una figura demencial, entre en pánico y caí de espaldas temblando como un orate. Razoné que quizás, haber fumado luego de bajarme medio litro de vodka sería el detonador de tan horrenda imagen.
Para asegurarme de que no haber perdido mis cabales, tomé la cámara fotográfica de jm que se encontraba tirada al lado del inodoro. Salí nuevamente fuera de la casa y volví a ver ésta imagen, en ese momento capturé ésta foto, la cual plasma en formato jpg, que no estábamos solos en Villa Gesell.